Dl Bd Ld Argiusta Jpeg 11Enclavado en el corazón del valle del Taravo, Argiusta-Moriccio es un pequeño pueblo corso lleno de encanto, donde el tiempo parece fluir al ritmo de la naturaleza. Rodeado de bosques de castaños y encaramado en la ladera de una colina, este pueblo típico ofrece un panorama excepcional del paisaje circundante y encarna a la perfección el alma auténtica del interior de Córcega.
Formado por dos aldeas, Argiusta y Moriccio, el pueblo posee un encanto propio, con sus casas de piedra, sus callejuelas y su ambiente sereno. En Argiusta, no se pierda la iglesia de San Sebastianu, un edificio del siglo XVIII que atestigua el fervor religioso local. El pequeño patrimonio rural también está bien representado, con fuentes, hornos de pan y apriscos tradicionales, símbolos de la vida pastoril de antaño.
Argiusta-Moriccio es la escapada perfecta para quienes buscan autenticidad, tranquilidad y contacto con una Córcega auténtica y virgen. Es una base ideal desde la que descubrir el corazón palpitante de la región de Taravo, con su naturaleza generosa, sus tradiciones vivas y su hospitalidad sincera.
Bat PanneauaccueilargiustaLos alrededores de Argiusta-Moriccio están llenos de tesoros naturales y culturales. Desde el pueblo, hay varias rutas de senderismo que permiten sumergirse en los paisajes del Taravo, incluido el bucle que lleva a la aldea abandonada de San Petru di U Canale, un paseo lleno de misterio en el corazón del maquis.
Qué ver en los alrededores de Argiusta-Moriccio :
– Petreto-Bicchisano: a pocos kilómetros, este animado pueblo ofrece tiendas, una hermosa iglesia barroca y un mercado local donde degustar los productos locales. Un punto de partida ideal para explorar el valle medio del Taravo.
– Palneca: un auténtico pueblo de montaña conocido por sus impresionantes paisajes, el senderismo y especialidades como la charcutería artesanal.
– Cozzano: auténtica capital del Alto Taravo, Cozzano es un ejemplo de desarrollo sostenible en un entorno rural, con su ecomuseo, su sendero botánico y sus iniciativas ecológicas.
– Zicavo: a las puertas del Parque Natural Regional de Córcega, este pueblo es un punto de partida hacia el macizo del Coscione, un destino muy apreciado por los senderistas en verano y los amantes de las raquetas de nieve en invierno.
– El puerto de Saint-Eustache: vistas excepcionales del Taravo y del golfo de Valinco en días despejados.
















